Fue una interpretación de “Vamos”, en el salón de baile Lomas del Sol, la que le valió a Charlie Aponte su entrada por la puerta grande en 1973 a la agrupación salsera más importante del país: El Gran Combo.
Desde entonces, ha aportado su sello como vocalista a la agrupación y desplegado su capacidad como sonero en temas como “Brujería”, “Amor brutal”, “Camino de amapolas”, “Compañera mía”, “Patria” y temas navideños como “Desenfunda”, “El arbolito” y “No hay cama pa’ tanta gente”, entre tantos otros.
Cuarenta y un años después de ingresar a la agrupación, hoy se conoce la noticia de que Aponte dejará El Gran Combo.
Conviene entonces hacer un repaso a una trayectoria importante como uno de los principales vocalistas de la agrupación con que le dio la vuelta al mundo.
Fue en 1973 cuando Pellín Rodríguez, entonces una de las voces principales de la agrupación, abandonó la orquesta para lanzarse como solista, y Rafael Ithier, director de la “Universidad de la Salsa”, se dio a la tarea de buscar a un sustituto.
Por varios meses, Marcos Montañez, hermano de Andy Montañez, cantó al frente del conjunto, en lo que Ithier realizaba la búsqueda. Pero, por referencia del saxofonista Eddie “la Bala” Pérez, uno de los fundadores de El Gran Combo, el director llegó hasta Caguas, donde Carlos Juan Aponte Cruz, nombre completo de Charlie, había comenzado a cantar diversos ritmos como un pasatiempo desde mediados de los 60 hasta los 70.
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